Lo que muchos piensan pero nadie dice acerca de vender…
Por alguna extraña razón, la palabra vender tiene muchas veces
una connotación negativa.
Seguro que también lo has notado, ¿cierto?
Puede que se deba en parte a su etimología.
No lo sé.
Pero nos han metido en la cabeza la idea de que vender es malo.
Pon atención a esto y tal vez entiendas el origen del asunto:
La palabra venta, tiene una raíz latina, que es «venum«,
y de esa raíz se deriva el adjetivo venalis (venal), que significa al mismo tiempo
«que está en venta» y «que se deja sobornar».
Al parecer allí está el sentido negativo de las palabras vender, venta y vendedor.
Puede que esa acepción del adjetivo venalis haya dejado una impronta en
el inconsciente colectivo.
“No me vendas nada”, dice todavía la gente, despectivamente.
O, «por favor no quiero hablar con él. Es un vendedor”.
“A mí, que nadie me venga a vender ninguna cosa”.
No deja de ser extraño y más bien absurdo.
Pero esa connotación negativa ha perdurado durante siglos.
El notable especialista en marketing directo, Santiago Rodríguez,
lo grafica bastante bien:
Para mucha gente, “vender es malo…
En cambio, comprar es bueno”.
También dice que la profesión de vendedor es una de las peor
consideradas por la mayoría de la gente, según diversas encuestas.
Posiblemente este sea uno de los más grandes contrasentidos, debido a la importancia
de las ventas en la civilización,
desde hace miles de años.
La treta del eufemismo
Así que muchos vendedores se vuelven camaleones y superponen otro calificativo
a su actividad.
Tal vez inconscientemente les incomoda decir que son vendedores de algo,
por muy bien que a la mayoría de ellos les vaya en esa actividad.
Pues ahora te tengo una noticia:
Todo el mundo vende algo.
La civilización ha progresado así durante milenios.
Alguien ofrece una cosa
que a veces es de tipo material. Otras veces es intangible.
Por ejemplo, una idea. Mucha gente vende ideas.
Otra persona necesita y quiere lo que ofreces.
Y te lo compra.
Es un intercambio totalmente válido y legítimo.
El error original…
Que se puede malear, como todo en la vida, es cierto,
pero en sí ni vender ni comprar son actividades negativas.
Puedes y debes vender tan alegremente como compras,
si estás convencido del valor de lo que ofreces o de lo que compras.
La parte negativa de vender no tiene relación con el acto en sí,
sino en algunas actitudes del vendedor.
Por ejemplo, tratar de engañar al comprador.
Ofrecerle algo que no sirve, que es de mala calidad,
o que es ilícito.
O prometerle algo que no cumple las verdaderas expectativas del cliente.
Como contrapartida,
el aspecto negativo de comprar, tiene que ver con algunas actitudes del comprador.
No con comprar.
Por ejemplo, consumir en forma compulsiva.
Comprar algo aunque no lo necesites.
Comprar en exceso, como una forma de gula.
O comprar tratando de desvalorizar lo que el vendedor te ofrece.
Desmerecerlo, minimizarlo, para regatear.
Esos son los aspectos negativos.
Pero no el vender o comprar en sí mismos.
Cómo ser el vendedor más grande del mundo…
En el mundo de los negocios modernos
esa frase se convierte en una pregunta clave:
¿Cómo vender más y mejor tu producto o servicio?
Porque a lo largo de la historia la gente ha desarrollado infinidad de
técnicas para vender.
Y muchas de ellas se han volcado al mundo virtual, donde la palabra
sigue siendo el hilo conector y conductor de la compra y venta.
Bien, en la web hay una disciplina que viene del mundo físico
y que se ha adaptado al mundo virtual.
Y con mucho éxito.
El copywriting.
¿Copy qué…?
El copywriting es un conjunto de técnicas que tienen que ver con el uso de la palabra
para incentivar la venta.
Palabras escritas o habladas.
Da lo mismo cualquiera de las dos formas de lenguaje.
Todo eso combinado con técnicas psicológicas muy eficaces para estimular la compra.
Seguro que no hace falta que yo hable por el copywriting.
Es un sistema exitoso que resalta por sus propios méritos en medio de tanto ruido.
Esta disciplina es muy útil para disparar cualquier negocio,
al aplicarla a las páginas de venta, al e-mail marketing, a los avisos,
y en general a todas las páginas que componen un sitio web de negocios:
página de inicio, página sobre mí/nosotros, página de servicios, página de contacto,
página de captura, catálogos, etc.
Lo importante es que se trate de un producto o un servicio que le sirva a alguien.
Ese es posiblemente uno de los requisitos más importantes.
Si no el más importante:
Que el producto sirva.
Pero aunque no lo creas, el principal cambio que tienes que hacer,
si quieres empezar a vender más,
es un cambio a nivel mental.
Y tiene que ver con lo que te comenté al principio:
Tienes que sacarte de raíz ese estigma del vender como algo incorrecto y de poco nivel.
Todos vendemos algo. Que te quede claro, y eso no tiene nada de malo.
Recuérdalo bien. El resto viene por añadidura si has hecho el cambio de actitud.